Crónicas del Mundo Libre (Parte I)

Como el mundo se cae a pedazos, como dijo Cris, salí a aprovecharme del mismo y dar una vueltita por unas islitas del norte. Aquí la primera parte:

Irlanda

Aguanten el Roca y el Sarmiento

Un país que pasó por más de 800 años de conquistas, contra-conquistas, revoluciones y contra-revoluciones, hambrunas y rebeliones. Se pelearon contra los vikingos, contra los británicos y entre ellos mismos.

A pesar de que la violencia estuvo presente hasta hace muy poco (más del tema en la parte II), no parece haber resentimientos sociales a punto de estallar ni ajustes de cuentas siendo llevados a cabo. Estuve en Dublin y otro pueblito cercano, en donde pude hacer un tour de esos a la gorra y pude hablar bastante con la guía. Si bien jodía con el tema de que habían entrado a la UE, les habían prestado guita que gastaron en puentes y trenes y casi se van al tacho por eso, ni ella ni nadie creían que hay que hacer una "refundación" ni nada. Lo toman como un mal momento y listo.

Aún así, parece que en ese país en crisis, hay grandes oportunidades laborales. Me encontré con una conocida que no se vuelve ni ahí. Un mozo uruguayo me contó que se había tomado un sabático y está levantando mucha guita acá. Una señora venezolana en el avión, venía a dejar al hijo en la universidad de acá, para hacerlo zafar del socialismo del Siglo XXI.

Pobreza estructural estilo villas, no ví. Así como tampoco mucha gente mendigando por la calle. Me crucé sí con el borrachín del pueblo y con dos señoras pidiendo "Spare some change?". Caminé por algún barrio industrial y calles no muy lindas de tarde/noche, sin ningún problema. Manifestaciones políticas y cortes de calle no me crucé.

La gente puteaba un poco por la situación económica, pero así y todo, la diferencia con Argieland es abismal. Puteaban, pero estaban todos los días en el bar a las seis en punto (si no antes), clavándose la reglamentaria cerveza.

Detalles de color:

Escabian bastante, en el mismísimo bar (nada de previas). El alcohol es un toque más caro que en Argentina, pero de calidad y variedad.

Trenes con Wi-Fi (tanto urbanos como inter-urbanos).

La obligada "pregunta opinadora": ¿Califican las irlandesas? Recontra califican.